
SONREÍA DEMASIADO
SONREÍA DEMASIADO
SONREÍA DEMASIADO
¿Podía un boxeador blanco, más bien tímido, bello e ingenuo, que llevaba una sonrisa impregnada en su gesto todo el tiempo, llegar a ser campeón mundial de la sanguinaria categoría de pesos pesados en los Estados Unidos a principios de los años sesenta?
¿Podía un boxeador blanco, más bien tímido, bello e ingenuo, que llevaba una sonrisa impregnada en su gesto todo el tiempo, llegar a ser campeón mundial de la sanguinaria categoría de pesos pesados en los Estados Unidos a principios de los años sesenta?
¿Podía un boxeador blanco, más bien tímido, bello e ingenuo, llegar a ser campeón mundial en los Estados Unidos a principios de los años sesenta?
¿Podía un boxeador blanco, más bien tímido, bello e ingenuo, que llevaba una sonrisa impregnada en su gesto todo el tiempo, llegar a ser campeón mundial de la sanguinaria categoría de pesos pesados en los Estados Unidos a principios de los años sesenta?
